La pancreatitis aguda es una de las urgencias más frecuentes en cirugía general y digestiva. Consiste en la inflamación súbita del páncreas, que puede variar desde una forma leve y autolimitada hasta una grave con riesgo vital.
Causas principales:
- Litiasis biliar (piedras en la vesícula que obstruyen el conducto pancreático o la papila de Vater).
- Alcohol (consumo excesivo y prolongado).
- Menos frecuentes: triglicéridos elevados, ciertos fármacos, traumatismos abdominales, complicaciones tras procedimientos endoscópicos (CPRE).
Síntomas típicos:
- Dolor abdominal intenso en la parte superior, que puede irradiar a la espalda.
- Náuseas y vómitos persistentes.
- Fiebre, taquicardia y malestar general en casos graves.
- Distensión abdominal.
Diagnosis:
Se realiza mediante análisis de sangre (amilasa y lipasa elevadas) y pruebas de imagen (ecografía abdominal y TAC).
Manejo inicial:
- Hospitalización inmediata.
- Reposo digestivo (suspender la ingesta oral).
- Hidratación intensiva con sueros intravenosos.
- Control del dolor con analgésicos.
- Tratamiento de la causa desencadenante: por ejemplo, si es por cálculos biliares, puede ser necesaria una colecistectomía o una endoscopia (CPRE) para extraer los cálculos.
La mayoría de las pancreatitis son leves y se resuelven en pocos días, pero las formas graves pueden complicarse con necrosis pancreática, infecciones y fallo multiorgánico, por lo que requieren vigilancia estrecha en UCI.